martes, 22 de enero de 2013

ANTOLOGIA POETICA FESTIVAL INTERNACIONAL DE POESIA GRITO DE MUJER 2013-VENEZUELA-ACARIGUA

Una Mujer Demorada. Camina cabizbaja. Con la esperanza de que el pelo arrope su rostro y lo oculte de las pupilas acuciosas. Demorada en el tiempo. Demorada en la distancia. De morada la paleta que se asoma por sus poros dilatados por tanta esperanza quebrada a la fuerza. Una mujer demorada en las ganas y el impulso, con los tobillos atados a cadenas invisibles que aminoran su paso y le acortan el perímetro. De morada por dentro con el color del luto que cubre su espalda cual cobija indeseable. Una mujer demorada y con el alma cautiva en el tornado de la angustia que presagia implacable su próximo vuelco. Una mujer demorada en la memoria de cuando se supone que era tan pequeña que aún no tenía recuerdos. Pero éstos a veces se asoman turbios y confusos, en cuartos oscuros, con manos lascivas y pegajosas; extensiones perversas de rostros amigables y conocidos. ¿Cuántas lo han sido? ¿Cuántas lo son? ¿Cuántas esconden su demora cual vergüenza, sin entender que esa vergüenza no les pertenece? Una mujer con el alma demorada por la saña de la lengua perversa, incisiva, indolente; con las lágrimas de la angustia mojando las palabras y los labios en el tiempo, que aunque corto, se hace eterno. Yo fui una mujer demorada. Y la paz, la cordura y la autoestima recuperada me alertan, me conmueven y me mueven cuando las miro en la calle, intentando ocultar su rostro, portador del color de su desdicha. Por eso doy un paso al frente y exhibo cual trofeo mi alma de nuevo soñadora. Para que me veas. Para que la sientas. Para que sepas que si es posible escapar ilesa de las garras del lloro. Todo cuanto fui ya pasó. Y nada puedo hacer para cambiarlo. Todo cuanto soy es una suerte de malabares entre lo que está dispuesto sobre la mesa y de lo que quiero servirme, en el más absoluto ejercicio del libre albedrío. Y así, intento día a día tejer una suave cobija que me acune primorosa y estar lo más cerca de mí misma que pueda, porque al final de todo, es donde está mi esencia y lo único que en realidad me pertenece. Trina Ortiz F. Festival Internacional de Poesía Grito de Mujer 2013. Venezuela. Acarigua Organizadora.
DECIR MUJER
Decir Mujer, es decir Amor
aunque suene mal decirlo
en boca de una misma
no es elogio, ni carisma
solo verdad inconfundible
solo acierto invaluable
Porque es amor incalculable
porque es entrega inagotable.

Decir Mujer, es decir dicha
es la dicha del concebir
a ese fruto deseado del amor
Es la dicha del parir, criar
es la dicha del cuidar con
profunda y gran pasión
a los hijos de este mundo
con orgullo y con tesón.

Decir Mujer, es decir ternura
porque es tierna cuando habla,
cuando arrulla a su criatura
cuando acaricia, cuando besa
entregando su hermosura.
Es tan tierna la mujer
que todo lo cura su ternura
como agua cristalina
que riega con dulzura.

Decir mujer, es decir lucha
la lucha del día a día;
es el férreo batallar
de principios y de ideas
Su lucha por el porvenir
por un mundo mejor,
donde acaba la injusticia
la maldad y el desamor.

Decir Mujer, es decir paciencia
es la constancia en lo que busca
es la conciencia de que si llega,
es la esperanza de que algo ocurra.
La trascendencia de su cordura
que la recuerden en su ausencia,
permaneciendo su gran presencia
que su aroma perdure así
permanente por siempre
en las mentes de las personas
que la amaron y la admiraron
ayer, hoy, mañana y siempre
Por todo ello y más les digo:

Decir Mujer; No es cualquier Cosa!!!

Autora: Noris Corteza Laino Mujica


LA LUNA Y EL SOL, ALEGORIA A LA CASTIDAD DE LA MUJER I El SOL le dijo a la luna que se fuera a recoger porque a deshoras de la noche no anda ninguna mujer. II La LUNA le respondió amor eso es cosa mía sabe la mujer honrada sale de noche y de día. III El sol un tanto enojado le grita soy el varón cuanto se dice de ti es una ofensa a mi amor. IV No entiendo porque te enfadas tu nunca vas a mi alcoba te me escapas por las noches y yo debo seguir sola. V Cuando mas hermosa estoy y de alegría radiante te hundes en el ocaso con un desprecio irritante. VI Soy el varón del espacio rey de la gloria y la fama y tu debes comportarte como la primera dama. VII Pero dicen que te han visto en el mar con los marinos en las pampas con llaneros y viajante por los caminos. VIII Tu vives del que dirán y yo de la imaginación a donde vas por las noches después del gran apagón. IX Preguntale a las estrellas ellas saben de mi vida soy casta pura y honrada no merezco tus intrigas autor: ELOY OLIVERO
MAS ALLÁ DE LO VIVIDO… El sol se oculta, la noche se anuncia, María sigue allí, con su mirada en el infinito El frondoso árbol de araguaney cobija sus sueños, Sus manos sobre su vientre acarician la vida, Los latidos de su corazón Se hacen cada vez más fuertes… Al caer la noche, reaparecen los fantasmas… Ya sus manos no acarician su vientre Posan sobre su rostro, para no olvidar, Los recuerdos aparecen… María, ya no sueña debajo del araguaney, Los fantasmas rondan… Él, su amado no volverá… Su rostro que aún conserva las cicatrices Del último encuentro, Dibuja ahora la despedida final… Vuelve a posar sus manos sobre su vientre Y descubre que la vida sigue, Que las razones sobran para borrar De su rostro y corazón El maltrato y abuso, Descubre que las cicatrices Del corazón aun siendo más profundas, Que las físicas, Ya no son importantes, La vida que crece en su vientre Y florece cual araguaney Le muestra que vale la pena vivir, Que su amado seguirá en su Corazón, Pero allí junto a las cicatrices que le produjera, Su corazón floreciente, Ya no le teme a la llegada de la noche, Por lo contrario, La espera para cobijar junto a las estrellas La vida que crece en su vientre… Solloza mientras la suave brisa Acaricia su rostro, Una estrella fugaz aparece, Cierra sus ojos, El amanecer anuncia un nuevo día… María, vive ahora Para su hijo, ha descubierto Que puede ser libre Y que su corazón es capaz de amar Más allá de lo vivido… Autora: Mirian J. Sosa de L.
RENACER Alguna vez fui, ya no lo soy. He cambiado, me he transformado. La vida, las cosas, los amores, los dolores Han hecho que deje de intentar. He cambiado, ya no siento, solo pienso Mi necesidad de parecer siempre equilibrada Tengo tanta cordura que me enloquece Me volví tan fría, tan pensadora Que pongo barreras para que la gente no me dañe Y al final termino hiriéndome yo misma Rasgándome con mis propias cercas Puedo sentirme sola aunque este rodeada de personas Aunque geográficamente este a un par de pasos, Emocionalmente estoy a kilómetros. Vivo huyendo de cualquier sentimiento ¡Me escapo tan velozmente! Y en el camino voy dejando heridos Quiero… Quiero volver a ser lo que una vez fui Ser un poco tonta, crédula No pensar mal de la gente y tener siempre razón Quiero aquietar mis pensamientos Saber que se siente “sentir” Quiero que no me importe parecer irresponsable Y poder hacer lo que quiero y no siempre lo que debo Sin preocuparme por pensar si está mal Añoro sentir el viento en mi cara Tan fuerte que casi me levante Anhelo desprenderme de la rectitud Ansío la libertad, la independencia del alma Debo renacer, enaltecer mi espíritu y cultivar mi paz. Autora: Natali Hernández. Acarigua.
En honor a las mujeres y como una forma de recordar el día 25 de noviembre Día de la No Violencia en contra de las Mujeres. “VIDA, SUMISIÓN, CAIDA Y GLORIA DE LA MUJER” (Poema) Naces niña… y cual flor divina perfumas con tu fragancia el mundo. En tus pasos primeros descubres que algunos voltean al verte, preferían al varón y su compañía… eres niña… y tu lugar se percibe secundario. Transitas por la vida con las ansias de tomar de ella la alegría y la alegría te da la espalda indiferente y cruel, eres niña… y tu rostro debe ser el drama. Pretendes con inocencia jugar a la independencia y a la vida libre y la vida libre te ignora con dureza inusitada, eres niña… y tu marca es la dependencia servil. En tu andar descubres tu inteligencia privilegiada y en algunos vez nacer raíces rastreras de envidia, pues eres niña… y no te es dado el destacar pues tu signo es la sumisión. Sumisión es tu destino ¡Oh mi niña flor! De pronto despiertas con intensidad la lujuria y el pecado en las mentes torvas y oscuras, la negra mano de rostro mundano rasga tus ropas y descubre tu carne, te cargan de las cadenas domésticas y simples y deambulas por la vida con tu traje de lúbrica piel… a la cual le han robado el corazón y el alma. Te ultrajan los ojos babeantes y depravados, tazándote como un trozo de carne que devorarán con sus asquerosos labios, tu nívea pureza es pisoteada por la exhibición más profana. Caes y te hundes en profundos abismos, te empujan al barranco de la perdición en noches preñadas de vergüenza, te levantas… y te golpean hasta que caes nuevamente, no los sacia ni tu dolor, ni tu llanto desgarrado, humillación, maltrato, vejación…. ¡oh mujer! que dura es tu caída. Retumba altivo, el clarín de la justicia, mis poemas, mi paleta y mi alma hoy gritan por tí, no temas mujer cuando caigas, allí estaré para tí… Ven tú a mis brazos mujer, yo lavaré tus heridas con paños de blanco marfil embebidos en las lágrimas de mil mártires, yo limpiaré tu cara y repararé tu alma, sanaré las llagas que el desprecio dejó en tu carne… dibujaré con oro un sol en el lienzo de tu piel, sembraré tu vientre de buenas nuevas y así el mundo será mejor porque tú ascendiste al trono del respeto. En altos pináculos estamparas tu risa y las salobres lágrimas no recorrerán más tus mejillas. Y te rendiré culto mujer, como a los Dioses y los santos en altares privilegiados y gritaré al orbe loas en tu nombre, Mujer… hija, esposa, amante y madre… Mujer siempre pura. ¡Gloria a ti mujer! Autor: Joseelcid 2009.Araure
Mujer bambú De la marea de las arenas nací altiva cual cielo de Mayo flexible como bambú. No para guardar la ceniza y las ollas no para cuidar y amamantar guerreros peones, esclavos o altivos gobernantes. No le pertenezco al polvo simiente del cedro, agua cósmica soy. Arroyo, mar, tormenta inacabada poderosa como ninguna. No soy la mitad de la costilla sino el entero de la madera. Atávica y profunda soy lo eterno femenino. Majestuosa en mi llanto en mi risa, en la osadía de ser y amarme mujer. No para príncipes sapos o princesas encantadas. No soy del sol, en todo caso, soy el firmamento la vida entera pasa por mis piernas. Agradéceme soy luz sin mí no sobrevivirías. Cultivas desde el Edén tus espigas del miedo. Intentas escapar de tus temores nombrándome demonio causante de males. Insinúas que no poseo espíritu ni alma cuando soy el alma de las cosas: La sinuosidad de mis caderas es la curva del tiempo Mi ombligo prodigioso es ónfalo de la creación Mi caverna de vida es el principio de las mareas Soy el terrible enigma que atormenta tus noches. Me buscas, pretendes conquistarme, pero no sabes quién soy o prefieres no saberlo. Reconocerme significa aquilatar mi majestad La superioridad de mi fragilidad sobre tu fuerza Esta frágil vida que muere y resucita pese a tus golpes llora y se rehace no obstante tus insultos tiembla y ríe victoriosa encima de tus embustes. He sobrevivido a tus bajezas a cada intento por denostarme Años miles de sujeción cúmulo de afrentas se deslizan por mi vientre. Inmarcesible me sobrevivo intangible te sobrevivo. Sí soy lo femenino madre, hija, esposa hermana, amante me llamas pero mi nombre es mujer. Oye bien, maravíllate con mi nombre mujer significa la sublimación de la naturaleza, cumbre creativa soy. Sí, eres escéptico, siempre has dominado, tus acciones son la medida de las cosas tu falo es la medida del universo. Todopoderoso desdeñas mi ingenio si acaso alguna vez lo consentí no fue bajo los dominios del placer ni posesa del espíritu de sumisión. Tuviste que encerrarme molerme a palos, negarme, enterrarme viva. Asesinarme una vez y otra y otra vez pensaste:- ¡mi fuerza ha triunfado! Pero estoy aquí sigo aquí, persisto, crezco a pesar tuyo Con cautela te acercas lanzas, soberbio, tus preguntas: ¿Es un ser vivo? ¿acaso tiene alma? ¿por dios es posible que razone? Si soy la razón del ovulomundo No, no te confundas no soy tu adversario soy superior a ti en eso. Frente al espejo universal palpo extasiada mis aréolas disfruto con fruición mis labios todos Fragante como flor de corozo tierna cual ocaso marino indómita, sensual y lujuriosa como el relámpago del Catatumbo. No, no te distraigas no te requiero para completarme Desbordada estoy de vida placer, saber infuso fuerza creativa y substancial inteligencia ¿Comprendes? no te necesito Puedo danzar sola eter na men te sin dioses ni demonios Soy humanidad risueña voy a ti para que te reconozcas humano también. Sólo eso sin injurias, afrentas engaños ni traiciones Mujer sin diminutivos desnuda al igual que tú nací no le pertenezco ni al aire Si eres como yo sabrás reconocerme. Mujer madera del universo Mujer arena Mujer bambú Del polvo de las injurias Renaces Altiva como cielo de mayo Mujer madera del universo Entona tu sensual canto Enamórate de la lujuria de tu ombligo Efervescente de amor contémplate al espejo Con orgullosa voz declárale a la imagen Tu majestuoso nombre mujer así sin diminutivos Mujer No el “vieja” despectivo Mujer. Mujer. Mujer. No esposa No madre No hija No sierva Desnuda sin atavíos del quehacer naciste Libre Para volverte infinidad de posibilidades Dispuestos tus ojos volcán para aprehender la esencia última y primera de las cosas El fuego del saber arde en ti como en cualquier otro Crepita en tu alma inmarcesible una exquisita creatividad Ven y alumbra las catorce dimensiones con tu flama boreal. Autora: Ifis

Oda a mi Voz. Desemboco aquí, donde la calma juega un partido de ajedrez con la desesperación... Me evaporo entre el silencio, las estrellas, y un tanto de nada... Doy vueltas al vaso antes de besarme recostada a la pared de mi cuarto sintiendo la brisa colarse... Hoy puedo amar hasta lo que no me ama. No conozco el verdadero motivo de estas palabras pero gozo el efecto, ese suspiro que brota de mi interior como un grito añejado... Quizás, estar consciente de todo lo que me rodea está empezando a afectarme, ahora en el rincón de la cama abrazando las sabanas no busco, ni espero nada que no venga de mi... Hoy puede romperse el límite de líneas donde casi siempre mueren mis poemas... ¿estaré escribiéndome? ¿Será este un eco perdido que se paseo por este cuerpo mortal sin encontrar salida? Igual, ya no lo escondo... Eres libre... Vuela voz... Llega hasta donde no se llegar y espérame, ya no hay miedos amarrando mis tobillos... Ve a mirar con mis ojos llévate estas alas de plomo, construye un cuerpo nuevo y espérame allí… Poeta Rosa Barroso Carora Edo_ Lara .
LA PREGUNTA. ¡Mujer, déjame hacerte una pregunta! ¿Acaso es sano vivir con ese dolor? Esa vaga oscuridad hecha mentira que devora hoy tu silente presencia. ¡Mujer, quiero confesarte lo que veo! Eres rosa que crece bajo luz de luna cuya pasión extingue la fría noche ahogando las estrellas en el océano. Tus pétalos albergan todo el universo en una explosión de radiante belleza que retumban en las paredes del alma y se prolongan a través del tiempo. Fuiste moldeada con polvo estelar, bañada bajo la luz del astro rey, desnuda tus alas y vuelas en el cielo pintando arcoíris en paraísos soñados. Secuestras mis sueños antes del alba como la sombra gris de una mañana, anunciando una tormenta de pasión que se desliza por los bordes de tu piel. ¡Mujer, solo quiero que sepas! Los recuerdos mueren en las cenizas. Mientras que siento que te descompones, podrán caer la luna y las estrellas, pero este recuerdo, la muerte ajena navegara en los mares del olvido preguntándose por esta tristeza de tempestades marchistas que con tu recuerdo la sensibilidad se hace un hoyo en mi pecho. No dejes que te lastimen, nunca más. Autor: Jhon Jairo Canelon
Cansada. (Para las que callan y se transforman en luz) Alguna vez te pedí paciencia, Y nunca me escuchabas. Te pedí que me esperaras, Y tus oídos se volvían sordos. Algunas veces te pedí un beso y me lo dabas sin objeción, Hoy tengo que suplicártelo, Para poder sentir un poco de amor. No importa si me mientes Si me castigas, Si me golpeas con palabras. Ya me has golpeado con tus manos, Y te juro que duele menos Que el que me seas indiferente. Estoy cansada de suplicarte perdón Por algo que no se que hice. He tenido que aprender a refugiarme en una canción Dentro de mi mente para no escucharte gritar. Una vez te mire a los ojos Y te juro, que me dio miedo. Solo he sentido algo frío atravesando mi garganta… Ahora no hay nada más que un silencio Y mi vida es diferente, No estas tú, Tampoco yo. Solo me convertí en un nido para gusanos, En una lapida fría que lleva mi nombre, Donde no quiero que me lleven flores. Se que no te olvidaste de mi, Que todas las cartas que te escribí en vida Las quemaste para no recordarme. Una vez fui tuya, La única que te amaba, La única que te entendía, Tú mejor amiga, Tu perfecta amante. De la noche a la mañana nos volvimos enemigos Y no entiendo por que Todo tenia que terminar de esa forma. Se que ahora no eres feliz, También se que me has llorado Y que cada día de tu vida Te arrepientes de haberme tocado. No me volviste a darme flores en vida, Ya de nada sirve que lo hagas ahora. Tampoco quisiste volver a hablar conmigo, Yo que atentamente te escuchaba Y aunque no puedo responderte, Se que sabes que yo estoy allí. Te ame, te amo, Pero espero no encontrarte de nuevo. Mira a tu alrededor, Estas tan solo como lo estoy yo, Aunque a diferencia de ti, Yo estoy rodeada de luz. No me alcanzo la vida Para demostrarte todo lo que te amaba. Se que en donde estas El tiempo se porta cruel, Pero recuerda que tú sufres ahora Por cada día que me hiciste sufrir a mí, Por cada lagrima que me hiciste derramar, Por cada golpe que me tatuaste en la piel. Por cada día que me hiciste sentir mal, Por las veces que me maldijiste. Allí te quedaras con tu culpa, Con tu conciencia en tinieblas, Con el dolor que le causaste a otros, Con tu alma miserable. Lastima que tu final Es así de mal. Ya no estoy cansada, Me convertí en luz entre tus manos. Autora: LOURDES ELISA GAMEZ GEORGERIN ACARIGUA ESTADO PORTUGUESA

No hay comentarios:

Publicar un comentario